lunes, 8 de octubre de 2007

La Piedrita en el zapato

Olañeta del Siglo XXI
Por Urbano Calle

En la primera Asamblea Constitucional de Bolivia en l825 participó con gran maestría en el manejo de la política y de la intriga Don José Joaquín Casimiro Olañeta y Güemes, nacido en Chuquisaca y fallecido en La Paz. Olañeta fue un maestro del convencimiento y como tal convenció al Libertador Simón Bolivar de separar el Alto del Bajo Perú, en compensación le ofreció que la nueva República llevaría su nombre, halago que no tuvo ni Alejandro El Magno, finalmente la nueva República termino llamándose Bolivia.
En la actual Asamblea Constituyente hay un personaje que tiene mucha semejanza con el perfil de Don Casimiro. Me refiero a Don Raúl Prada Alcoreza, por su corta estatura se lo conoce tambien como «chato». Con esa habilidad, propia del doctor de Chuquisaca, Prada introdujo varias de sus ideas en la nueva Constitución. La primera, hizo creer a los masistas y a todos los ingenuos bolivianos que la Asamblea era originaria, fundacional y con plenos poderes. Al paso del tiempo la Asamblea no es fundacional, porque no se fundo, aún, ningún nuevo país. Originaria, tampoco y menos plenipotenciaria porque ha caído en manos de los partidos políticos y los asambleístas solo saben levantar la mano. El Jefe de la bancada del MAS Ramón Loayza , que ha mejorado notablemente desde su caída del proscenio del Teatro Mariscal, aún sigue con la idea de que la Asamblea es fundacional.
Raúl Prada que siempre usa un sombrero alón y a la moda de los blanquitos que quieren pegarse a la corriente indígena lleva un saquito de lana tejida para llevar coca.. Ni con eso puede vender su imagen de originario.
Más tarde puso en la Constitución el termino de Multinacional, es decir rebuscó el término para fundamentar que el país no es una unidad sino que es un conjunto de 34 naciones, que tienen derecho a la libre determinación. Es decir Prada nos atomizo y nos convirtió en un país de 34 ayllus, si vale el termino. El zafarrancho que armó su teoría es mayúsculo y aún es un punto muy discutido en la arquitectura constitucional. Prada sabe que hay dos naciones muy grandes indígenas, la quechua y la aymara, esta última ocupa territorios de Perú y Chile. Qué pasa si declaramos como nación a la Aymara que tiene mas territorio entre Chile y Perú que en Bolivia . En La Paz llega hasta Charazani, donde ya se habla Quechua.
Pero la ultima es de antología. Para lograr despistar a paceños y chuquisaqueños, invento la “parábola”, según le declaro a la periodista Amalia Pando, de “asentamiento institucional” que se lo compro UN y su asambleísta Pol la introdujo entre los temas de discusión de los dos consejos creados para salvar a la Asamblea Constituyente.
“Asentamiento institucional” es un eufemismo que me enerva pues Chato Prada cree que paceños y chuquisaqueños somos unos come nabos. El termino es la misma chola con diferente pollera y no tiene nada de “parábola”.
Quienes llevaron a Prada a la Asamblea Constituyente son los vecinos de las laderas de la zona sur, de la circunscripción 9, quienes votaron por el MAS en forma corporativa y votaron por él y ahora despotrican contra los paceños que están haciendo daño a la Constituyente. Gracias a Prada este viernes estaremos desfilando para protestar porque su idea mando a la basura todo lo avanzado. Las actitudes de Chato Prada es muy similar a las de don Casimiro Olañeta, pero en el Siglo 21.

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