jueves, 17 de octubre de 2019

Hoja del Sur 1221

La Paz 18 octubre 2019


Votar en las elecciones es
derecho y deber ciudadano
Por Armando Mariaca


Al entenderse que la democracia entre los muchos valores y principios que tiene, está el bien común que es el conseguir bienestar para todo el pueblo, como en concreto decía Aristóteles “la buena vida de las multitudes”, una de esas formas es la elección libre, espontánea, no coaccionada de las autoridades del país.   En las actuales circunstancias, la elección general de Presidente, Vicepresidente, senadores y diputados de la República.
Para cumplir este principio que es derecho y deber ciudadano, no hay procedimiento mayor que votar en procesos electorales.   Esto implica que, en democracia, el bien común consiste en el conjunto de condiciones morales y materiales necesarias para la convivencia de los hombres con la única salvedad de que debe ser gozando de libertad sin condición ni presión alguna puesto que el voto es la manifestación de la libre expresión; es muestra de ausencia o carencia de cualquier presión, sugestión o interés o conveniencias creadas que nadie puede vulnerar, alterar o desconocer porque la libertad de expresarse libremente proviene de la misma libertad de pensamiento de cada ser humano que puede proceder conforme a los dictados de su conciencia.
El voto es la libre manifestación o expresión del ciudadano que en un acto electoral lo manifiesta votando por quien cree, conciencialmente, que puede ser la persona idónea, capaz, consciente, honesta y responsable para cumplir con las tareas, deberes y obligaciones que demanda el ejercicio de un cargo que, en todo caso, debe estar supeditado al servicio del país; sin embargo, hay situaciones o condiciones que determinan que el voto, por la desigualdad y pobreza que normalmente generan susceptibilidades y desconfianzas, muchas veces llegan a la violencia desestimando la democracia habida en el país.
Conforme a dictados constitucionales, votar es un derecho que goza  de libertad e igualdad, cualidades que siempre van parangonadas con el principio de que todos los habitantes son iguales y libres ante la ley.   Este principio da lugar a que cada quien vote por quien considere conveniente y, además, da derecho a votar en blanco y hasta anular su voto.    Estos dos procedimientos muestran indiferencia por todos los candidatos pero, votar en blanco o anular el voto implica gozar de libertad de expresión que nadie puede coartar.
Votar, pues, es un derecho y un deber.   Quienes no votan pueden alegar incapacidad física o mental, ausencia temporal o permanente del país y no estar inscritos en el respectivo Padron Electoral; igualmente, quien no desea concurrir a votar lo hace atenido a su propia conciencia y decisión soberana y libre; pero, en todo caso, quienes pueden hacerlo y no lo hacen por cualesquiera razones forzosas, deberían votar así sea en blanco o nulo para mostrar su libertad de expresión y conciencia.
El escrutinio

También es deber y derecho ciudadano el estar presente en el momento del cierre del proceso y ser testigo del acto de apertura  del ánfora y escrutinio de los votos en su mesa , para certificar la transparencia del acto eleccionario.
La presencia de los ciudadanos en el acto del escrutinio es importante para dar mayor validez al acto.
La presencia ciudadana tanto en el acto de votar como en el cierre del proceso es de gran importancia en el acto de elegir a las nuevas autoridades que conducirán el Estado por los próximos periodo y mas aún si se produce una segunda vuelta, en diciembre, entre los dos candidatos con mas votos.
El proceso que viviremos este domingo es de gran importancia para la vida y desarrollo de nuestra patria. (N,R, Hoja del Sur)

¡Chau Evo!
Por Puntero

El presidente cocalero en vez de salir por la puerta grande de la Historia, prefirió correr el riesgo de intentar ilegalmente un cuarto mandato, ante el desprecio de la clase pensante en Bolivia, tan harta de su figura que solo su guardia pretoriana impide que lo saquen a escobazos en sus visitas, como sucedió en Potosi y Santa Cruz. Millones de ciudadanos piden el desacato al fraude montado por el TSE y ese gesto podría traducirse en una violenta turbulencia letal para los impostores. En la dicotomía del domingo no caben actitudes tibias, los bolivianos deciden entre Evo o Mesa, entre la dictadura perpetua o la democracia. Lamentablemente una parte de la ciudadanía como sumisas ovejas votará por Evo. En caso de ganar el fraude, el país podría llamarse, no Bolivia, si no Ovejuyo.


Agenda Social y Cultural


Reunión de los capuchinos en el Alexander

El Grupo de los Capuchinos asiduos clientes del Café Alexander, el pasado martes  celebraron el cumpleaños de  su amigos  Humberto Zamorano (Icho) . En la gráfica por la derecha. Hernán Zevallos, Rony Lucio, Jorge Rodríguez, Rene Elio, Antonio Benavides, Gonzalo Riveros, Tomás Monje (de pie) el cumpleañero Humberto (Icho) Zamorano y Carlos Becerra.

AGENDA

REPIQUES. GUITARRA FLAMENCA  Alexandre Gonzales joven interprete, ejecuta temas  del repertorio universal en versión flamenca: Desde la Comparsita hasta Entre dos aguas. Lo acompañan músicos  destacados y bailarines de la escuela Andalucía. Bs.40. Teatro Modesta Sanjinés. Av. Mariscal Santa Cruz esq. Potosí. 22y 23 de Octubre.
Jesus Adrain Romero Concierto del cantante y compositor mexicano de música cristiana, quien presentara lo mejor de su repertorio. Teatro a Aire Libre  Jaime Laredo, Av. Del Ejercito. Entradas de Bs. 480  a 180. Viernes 25  Hs. 19.
SIMBIOSIS. El departamento de cultura y arte del espacio Patiño  presenta al Taller Experimental de Danza de la UCB en la obra dirigida por Norma Quintana. Teatro Doña Alina. Entrada libre.
TALLER DE MURALISMO “Callejeras  Insurrectas”  actividada organizda por jóvenes artistas urbanas. La Galerie.Alianza Francesa. Sopocachi. Entrada Libre.

Preocupante

Hemos tenido la oportunidad de ser abordados con este tema y se que a más de una madre boliviana se le escapó una lágrima, suspirar profundo y buscar unas monedas en su bolsa, para ayudar un poco.  Cada día aumentan los niños venezolanos que viven en las ciudades del país y ya aprendieron a pedir limosna para no sentir hambre, porque sus padres huyeron de su linda tierra que dejó de ser grande y por ahora no lo es; cada vez hay menos trabajo y peores condiciones para vivir papá, mamá y los pequeños que seguramente no lo entienden hoy. Ni siquiera sospecharán que su Presidente, político encaprichado y duro, tiene mucho.  Pero no le importan sus paisanos; sino la imagen de su gran jefazo.  Dios no permita que suceda lo mismo con nuestro hermoso país... Creo que estamos en puertas de frenar un destino tan penoso y horrendo.

Don Vicente

Valija Diplomática 
Por Molotov

TOCATA Y FUGA: los cívicos potosinistas corretearon a EVO y ALVARO que fugaban en motos hasta el helicóptero, dejando en camino desechos intestinales causados por el miedo…
ASALARIADOS ?el zorro BERSAIN circuló nombres amigables en Miami a enviados eleccionarios a Bolivia entre ellos figuran MARIANELA MONTENEGRO y CARLOS VALVERDE quienes votaran NULO…
UNA LOCA EN EL CABILDO ataviada como bruja fue expulsada cuando sibilinamente apoyaba al MAS…
ROBO EN LA CASA PRESIDENCIAL aligeró a EVO de 40.000 dolares según investigó CARLOS VALVERDE (gastos reservados o conservados?)
OVACIONES para WALDO ALBARRACIN, nervio y motor del cabildazo paceño que decretó desacato si gana el fraude…
EMBAJADOR IMPLICADO en el LAVA JATO es JOSE NINN FRANK, sefardí en Brasilia quien sería declarado persona non grata por BOLSONARO…
DRAMATICA INVOCACIÓN lanzó TUTO QUIROGA para votar por MESA, si nó  BOLIVIA SE NOS MUERE como diría VPE…
GRAVE ACUSACIÓN de AHORA CON ROXANA sobre la gorda cuenta bancaria del trio EVO-ALVARO-ZAPATA en el VATICANO..
CANDIDATO GRINGO sería el coreano CHI en cuyo nombre sobra la H y falta la A….
PRONOSTICO PARA EL DOMINGO: 1.- EVO 2.- MESA 3.- CHI 4,- ORTIZ y los restantes 4 en el basurero de traidores figuretes…

La Receta

Cocido español

INGREDIENTES  
350 gr. de garbanzos.
175 grs. de repollo.
175 gr. de tocino.
5 chorizos españoles.
1 cucharadita de sal.
1 hueso de jamón.
1 hueso de vaca 
2 morcillas.
2 ramas de hierbabuena.
1 pechuga de gallina.
1/4 falda de ternera. (vacio)
2 ajos  
PREPARACION  
Los garbanzos se ponen en remojo la noche anterior. El repollo se cuece aparte para después de rehogarlo con un par de ajos .En una olla con dos litros de agua se pone a cocer el tocino, mejor veteado, con los huesos de jamón y vaca, la hierbabuena la pechuga, la falda y el chorizo, aunque este último es mejor cocerlo con el repollo y dejando cocer media hora a olla destapada. Seguidamente se incorporan los garbanzos con la sal y se tapa la olla para dejarlos cocer tres cuartos de hora con presión. Se abre la olla para incorporar las morcillas, volviendo a cocer diez minutos más, habiendo rectificado la cantidad de agua y sal si fuera necesario.  
Una vez terminado y los garbanzos tiernos, se cuela el caldo para la sopa. Los componentes se distribuyen de la siguiente forma: los garbanzos en el centro, el repollo a un extremo y las viandas al otro. La operación de separación de los componentes sería facilísima si se efectuara la cocción dentro de unas bolsas de red.  
El cocido antes de servirlo debe dejarse en reposo diez minutos debidamente tapado.  

Vale un Potosí
Por Alvaro Riveros Tejada

Sin mucha faramalla, pero con una contundencia mil veces mayor a cualquier tipo de encuesta, cuya fuente está generalmente basada en la opinión de unos cientos o pocos miles de consultados, la población boliviana ha decidido acudir a la antigua fórmula española del cabildo, para expresar nítida e incuestionadamente su posición frente a los próximos comicios presidenciales. 
Las apoteósicas concentraciones realizadas en las tres ciudades del eje central Santa Cruz, La Paz y Cochabamba fueron los indicadores más idóneos y suficientes, para contar con esa información demoscópica que nos ofrece los datos más próximos a la realidad, y que los bolivianos obtendremos en los resultados de las elecciones de este próximo domingo. La gran mayoría, sino el total de esa concurrencia cabildera es de personas que emitirán su voto y, por lo tanto, un 98% de ellas lo hará en contra de la fórmula oficialista, inclinando así la balanza hacia la victoria de la legalidad. 
Quien dude de la participación millonaria en el cabildo cruceño convendrá con nosotros que, sumándole los asistentes a los cabildos de La Paz, Cochabamba y, muy pronto los de Potosí, Oruro y Tarija, estaremos muy cerca de los 3 millones y medio de seguros votantes que lo harán en ese sentido, lo que significa, más del 50% del padrón electoral.
Las tres últimas encuestas publicadas en el país dieron un resultado de menos de 10 puntos a favor de Evo Morales respecto del segundo en la contienda, Carlos Mesa, lo que podría indicar que habrá una segunda ronda electoral en el país entre ambos candidatos. En todos los casos, existe entre un 20 y 30% de indecisos o personas que no dicen por quién votarán, pero al influjo de las concentraciones señaladas, fácilmente harán variar el resultado final en las urnas.
Ahora bien, una gran parte de esa masa de cabilderos es políticamente amorfa y no abraza necesariamente un partido o una doctrina política. El clamor de ellos, varias veces expresado y nunca atendido, es la unión de los candidatos opositores que, según las encuestas, tienen más chance de fortalecer un frente que eche por tierra las aspiraciones del binomio oficialista ilegal y quedadizo que, de ganar en la primera vuelta la contienda y, aún peor, volver a tener dos tercios de un congreso obsecuente y servil, se convertiría en una dictadura de facto. 
Sin embargo, ante ese temor, quienes deberían unirse son los cabilderos, en torno a una sola idea-fuerza que signifique “votar por el mejor clasificado” en los sondeos de opinión y convertirlo en el ariete de sus justas demandas. 
A pocas horas de la justa electoral, de nada servirá enarbolar siglas o postulados filosófico-doctrinarios, cuando el lobo está mostrando las fauces en la puerta. En estos momentos la actitud de una sociedad que quiere librarse de la iniquidad y el desastre debe emular a los valientes potosinos que obligaron a los candidatos ilegales a empren*der la fuga en una motocicleta, de su acto de proclamación, al considerar su presencia, como una falta de respeto al paro cívico que ya llevaba una semana. Dicha actitud, bien vale un Potosí.

Desde La Tierra
Ciudadanos derrotan dictaduras

Por Lupe Cajías

Hace cuarenta años, al anochecer del 16 de noviembre de 1979, Lidia Gueiler Tejada saludó al pueblo reunido en la Plaza Murillo para celebrar, en medio de gritos jubilosos, la derrota del golpe para imponer un gobierno cívico militar por encima de la voluntad popular.
No era la primera vez que la población desarmada arrinconaba a políticos y uniformados que querían gobernar con el terror, como Plácido Yañez fusilando a presos en el siglo XIX o la logia RADEPA escondiendo muertos en Chuspipata en 1944. Siempre hay un límite para los desenfrenos del poder. El régimen que cruza la raya roja no dura.
 Desde las primeras elecciones de 1978, sin políticos perseguidos, Bolivia enfrentó meses de inestabilidad. No era fácil perder el miedo a la libertad, aprender a tolerar al adversario, vivir en democracia. Hay rezagados en todas las épocas que no logran respetar el resultado de las urnas, mantener las reglas del juego iniciales, convivir con la independencia de poderes.
La Corte Electoral elegida en los estertores de la dictadura de Hugo Banzer anuló los comicios por el grotesco fraude electoral. El delfín, otro general, Juan Pereda Asbún no se resignó y tumbó a su padrino. No subsistió mucho. En una parrillada, los militares resolvieron cambiarlo por otro y asumió David Padilla sin derramamiento de sangre porque prometió convocar inmediatamente a nuevas elecciones.
El victorioso frente UDP no consiguió la mayoría parlamentaria en las urnas en 1979 y se optó por una solución constitucional pero no popular. El presidente del Senado, Walter Guevara, fue posesionado como primer mandatario con la misión de convocar otra vez más elecciones generales. No pudo gobernar más de dos meses.
El Primero de Noviembre Guillermo Bedregal Gutiérrez y civiles aliados con Alberto Natusch Busch y otros militares lo derrocaron, echando además por la borda el triunfo diplomático por el tema marítimo acordado un día antes en la Asamblea de la OEA.
Enterado del ruido de bayonetas, el pueblo volvió a descolgarse desde las laderas hasta el centro de la sede de gobierno. Trabajadores, oficinistas, estudiantes ocuparon las calles, enfrentaron las tanquetas de la muerte, rodearon batallones, bloquearon las calles.
Muchos muertos, decenas de heridos, llantos en la morgue fueron escenas diarias hasta derrotar a los asesinos. Bolivia volvió a la senda democrática, “a la boliviana” eligiendo a la presidenta de la Cámara de Diputados, en medio de muchas tensiones.
Ese entonces la vanguardia eran la Central Obrera Boliviana y la Federación de Mineros, actualmente subsumidas como administradoras de hoteles y flotas de camionetas. Ni la COB ni los sindicatos tienen la capacidad de convocar ahora a derrotar al binomio ilegal y mucho menos igualar la desobediencia civil de noviembre de 1979.
El turno es de los comités cívicos que en la resistencia de una década han recuperado protagonismo y, algo inesperado, amplia legitimidad. El cabildo en Santa Cruz de la Sierra marcó el nuevo giro, no sólo por las multitudes, sino por la pluralidad de oradores, las consignas para unir a la patria, a oriente y occidente y por el discurso sereno pero contundente de Luis Fernando Camacho.
Los sucesivos cabildos en el resto del país respaldaron esa línea. El derecho de los pueblos a desobedecer a los gobernantes

¿Vuelve el populismo?

Por Marcelo Ostria Trigo


Muchos creímos que el populismo en América Latina  estaba en camino de desaparición. Parecía evidente el desencanto general con el fracasado Socialismo del Siglo XXI, adoptado por el chavismo en Venezuela y seguido, con variantes, por los países afiliados a de la ALBA. Resaltan la terrible crisis que se desató en Venezuela, los magros resultados en el Ecuador que abandonó el modelo, la extrema violencia empleada por el régimen sandinista de Ortega y Murillo en Nicaragua y en Bolivia la ineficiencia, corrupción y el afán del régimen de eternizarse en el poder del partido oficial. Todos con el ejemplo de la Cuba de los Castro.
Lo evidente es que hubo señales de retroceso de los simpatizantes del populismo: los Kirchner en la Argentina, e Inácio “Lula” da Silva y Dilma Rouseff en el Brasil, que tanto apoyaron el experimento chavista, perdieron el poder, y Ecuador, ya sin Correa, dejó atrás ese modelo, en Uruguay el izquierdista Frente Amplio que se resiste a condenar la barbarie venezolana y busca su cuarto período en el gobierno, ya no tiene el mismo respaldo de los últimos años. Otras señales de deterioro de esta corriente: El presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, logró el reconocimiento de medio centenar de países; se constituyó el Grupo de Lima con gobiernos que exigen al régimen de Nicolás Maduro, respeto a la ley, a las instituciones republicanas y a los derechos humanos. Es más, la representación de Venezuela en la OEA la ejerce un enviado del presidente Guaidó.
Pero el populismo insiste en recuperar lo perdido. y aún expandirse en el continente. Muestras de esto: en la Argentina el kirchnerismo, tiene un nuevo candidato, pero con la señora en espera de una nueva oportunidad y lidera las encuestas. En el Ecuador se han desatado violentos disturbios que son alentados por  nostálgicos y por Rafael Correa que, desde su refugio en Europa, pide nuevas elecciones y se ofrece como candidato presidencial. El presidente de México, López Obrador, pese a sus giros poco comprensibles, es cercano a los chavistas. Y en Bolivia, el régimen sigue en el empeño de eternizarse en el poder violando la Constitución y la voluntad ciudadana. Por supuesto que estos intentos no tienen asegurada su meta expansionista. Hay vastos sectores que defienden la vigencia de las libertades democráticas.
Como una nueva muestra del cínico empecinamiento populista, el régimen de Nicolás Maduro ha presentado la candidatura venezolana, nada menos que para integrar el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas; el organismo que cuenta con la Alta Comisionada que emitió un informe concluyente sobre los horrores de la represión política del régimen chavista.
El futuro político parece incierto, pero los pueblos saben que la libertad es irrenunciable.

Del modesto Jersey a
la chaqueta de diseño
Por Juan Carlos Salazar del Barrio

Conocí a   Evo Morales -es decir, lo vi por primera vez- durante una “cumbre” de organizaciones indígenas y campesinas en Cocoyoc, México, organizada  por Rigoberta Menchú, a mediados de los 90. Evo era un humilde dirigente cocalero que buscaba infructuosamente -“rogándose”, como decimos los bolivianos- el aval de la ganadora del Nobel de la Paz  para una resolución de apoyo a los cocaleros del Chapare. Lo vi por segunda vez en el Palacio de la Moncloa, tras su entrevista con el presidente José Luis Rodríguez Zapatero, en su primera gira por Europa, recién elegido, en enero de 2006. Y en una tercera ocasión, ya Presidente, en un desayuno ofrecido por el presidente de Repsol, Antonio Brufau, en un hotel de Madrid, echándole flores al anfitrión por su “comprensión” ante la “nacionalización” del petróleo.
Recuerdo que llegó a la conferencia de prensa de la Moncloa con su “jersey” a rayas, que tanto impacto causó en España, humilde y, sobre todo, auténtico. En sus primeras palabras, confesó que nunca se había imaginado que algún día iba a ser recibido por un rey y afirmó que había pedido a Rodríguez Zapatero, y al monarca que le aconsejaran y ayudaran a gobernar, porque él -así lo dijo- no tenía ninguna experiencia en el arte de dirigir un país.
Se mostró muy agradecido con la reina Sofía, porque le había hecho llegar al hotel unos antigripales, afligida al verlo tan desabrigado, apenas con un “jersey”, en el crudo invierno madrileño. “¡Qué tío tenéis por Presidente!”, recuerdo que me dijo un colega, resumiendo la admiración de los periodistas españoles. Los había conquistado con su humildad y sencillez.
No resisto la tentación de comparar al Evo del “jersey” con el Evo de las chaquetas de diseño; al campesino orgulloso de su natal Orinoca con el líder del museo propio y el inquilino del lujoso palacio presidencial, ahora que se postula para una nueva reelección. Y no es que pretenda que el Presidente de Bolivia vaya por el mundo dando lástima, no, pero una cosa es representar al Estado con dignidad y otra hacer ostentación de lujos que chocan con la pobreza del país.
La transformación de Evo a la sombra del poder, después de 13 años de gobierno, está directamente relacionada con la mutación del movimiento que lo impulsó a la jefatura del Estado, el llamado “proceso de cambio”, que terminó cambiando a sus líderes antes que al propio país, como se proponía en sus albores. Evo es la personificación de ese viaje sin retorno. De Chaparina a la Chiquitania.  
La deriva de ese proceso y sus dirigentes me trajo a la memoria la novela Rebelión en la granja, la extraordinaria fábula de George Orwell sobre el tránsito de una revolución a un sistema autoritario, a partir de la corrupción que acompaña toda acumulación de poder, porque -como dice el jesuita Xavier Albó- “el poder corrompe y el poder absoluto corrompe absolutamente”.
La historia de la granja es muy sencilla. Hartos de la explotación a la que están sometidos, los animales expulsan al propietario, un granjero vago y alcohólico, con el propósito de crear una sociedad igualitaria, manejada por ellos mismos, aspiración que se traduce en una “constitución” de “siete mandamientos”. 
Poco a poco, los líderes se van apropiando del movimiento -y de la granja- y terminan haciendo lo mismo que hacía el patrón expulsado, dándose al lujo y a la buena vida, para lo cual no dudan en quebrantar su propia ley. Los “mandamientos” van desapareciendo sucesivamente y, al final, queda uno solo, el que proclamaba que “todos los animales son iguales”, pero con un aditamento: “todos los animales son iguales, pero algunos son más iguales que los otros”.
Morales buscará dentro de un día la reelección. Lo hará contraviniendo la Constitución que él mismo impulsó y el mandato expreso de un referendo. Al incumplimiento de la ley, de por sí grave, se suma el quebranto de un principio ético, moral, el de la palabra empeñada. Cuando todavía usaba el “jersey”, repetía la consigna -tomada de los zapatistas mexicanos- de “mandar obedeciendo al pueblo”. Obviamente, no obedeció el mandato del 21 F, ni quiere irse a su casa, como prometió al menos en tres ocasiones si ganaba el NO.
Winston Churchill dijo que “tras un recuento electoral, sólo importa quién es el ganador. Todos los demás son perdedores”. Podría darse que el 20 de octubre no haya un ganador, sino dos, o que el verdadero ganador sea el segundo, si los electores obligan a la realización de una segunda vuelta, en la que se invertirían los papeles, con el opositor como favorito. 
Me pregunto si Evo respetará en tal caso el veredicto popular. Si no lo hizo una vez, ¿por qué tendríamos que creerle que lo hará ahora?

Bolivia, al borde
del abismo

Por Luis  Antezana Ergueta

La situación política boliviana no marcha por un camino amplio y recto de rosas que conduce a un destino seguro. Al contrario, marcha por el filo de la navaja y el menor desliz puede conducirla a cualquiera de los lados de un insondable abismo de espinas y abrojos. Ese panorama incierto y escabroso es más fácil de advertir en una etapa electoral como la presente en la que hay que tomar decisiones heroicas que eviten una calamidad histórica.
La marcha hacia las elecciones del domingo próximo se ha caracterizado por la falta de contenido de los partidos contrincantes. Estos han perdido la perspectiva histórica y giran en un círculo vicioso de ofrecimientos superficiales que no tienen visión al futuro. Ninguno de los programas de gobierno ofrecidos se refiere a las causas de la crisis del país y más bien se limitan a efectos secundarios que han obnubilado las mentes de los protagonistas de primera fila de las campañas partidarias.
En esa perspectiva, el futuro seguirá siendo incierto y, naturalmente, estará acompañado de dudas e inquietudes sin fin, a no ser que alguno de los ganadores dé un golpe de timón que saque al país de la larga etapa de transición del coloniaje a la nación y supere, a la par, dejar atrás la caótica etapa populista caracterizada por los grandes saldos comunarios y feudales y permita dar al país un salto adelante, para pasar a la democracia y no solo a una simple democracia, sin a la más amplia democracia. 
De no encontrarse solución consciente a las causas que determinan efectos como la agitación permanente, incertidumbre, falta de objetivos, etc. el proceso histórico, que no se detiene en ningún momento, buscará por sí mismo, erradicar los problemas y marchará adelante (como ha hecho en numerosas veces y como ya se advierte), actuará inevitablemente con la sabiduría que le caracteriza. En ese sentido, la historia no esperará que aparezcan salvadores mesiánicos y programas providenciales que equilibran en el borde del precipicio.
En la presente etapa de transición irracional, --en que el agónico pasado sobrevive en forma abrumadora y se opone uñas y dientes a desaparecer y un futuro no termina de nacer--, se agudizan los problemas, las soluciones se retardan y se embrollan aún más.  Pareciera que no hay futuro.
Pero, hay futuro. La sociedad boliviana —pese a los problemas heredados-- ha roto los lazos que le ataban al futuro, no ceja de avanzar, madura las soluciones que ella misma concibe y no necesita de tutores que le enseñen a hacer lo que ella misma muy bien sabe hacerlo. Superados los grandes escollos que le impedían avanzar, construye con paciencia el amplio y seguro camino a un futuro brillante.
Hay solución. Cuando más negra es la noche es porque más cerca está el día. En caso necesario, cuando todo parece perdido, el pueblo inventa de inmediato los hombres y las soluciones necesarias para seguir adelante. Tiene la desgracia de no morir, diría un escritor, confiando en la espontaneidad y la actitud consciente de sus valores y ver la gran perspectiva. La situación no es de calamidades sin fin e incertidumbre permanente, sin que sea necesario decir que los males no son eternos. No es el último día de la humanidad. Estamos en las primeras horas de una larga historia y es hora de evitar por entre todos los peligros, perder la serenidad y evitar no caer en el abismo en momentos en que se equilibra en el filo de la navaja.

Nociva contaminación acústica en La Paz


Por Mirna Quezada Siles


Las campañas de diferentes partidos políticos aumentaron el daño al medioambiente en la ciudad porque aparte de dejar basura en muchas zonas,  utilizaron megáfonos, parlantes, tambores (para las batucadas constantes) y bocinas en el recorrido de sus caravanas.
Fue un verdadero suplicio para los vecinos y -ahora- sería grato afirmar que ya no existe contaminación acústica; sin embargo permanecen otros ruidos. A diario  -incluidos los fines de semana- desde tempranas horas se escuchan altavoces de quienes ofertan sal yodada, víveres o fruta de todo tipo; bocinazos del transporte público; el silbato del afilador de utensilios; equipos de sonido que se instalan en kioscos, restaurantes, mercados y supermercados.
Rematan el caótico panorama aquellas alarmas de automóviles que suenan incansablemente y sin piedad en distintos estacionamientos o garajes; pero sin duda alguna se llevan la flor los camiones repartidores de garrafas con GLP que con sus fuertes bocinas de aire comprimido; canciones estridentes y gritos del personal acaban destemplando los nervios hasta del más sosegado poblador de La Paz.
La contaminación acústica es uno de los mayores problemas ambientales de nuestra sociedad. El aumento de la población y de sus diferentes actividades así como el incremento del parque automotor genera tremendo ruido que afecta  a la gente de forma distinta.
Las consecuencias no son pocas: pérdida auditiva temporal, irreversible o progresiva; desórdenes en la presión arterial y el ritmo cardíaco; tensión muscular y trastornos digestivos; estrés; problemas hormonales, respiratorios, gastrointestinales, además de otras consecuencias psicológicas y emocionales, como las relacionadas con la pérdida de sueño. 
La reglamentación existente sobre contaminación acústica está dentro el marco de la Ley Nº 1333 del Medio Ambiente, que establece 65 decibeles como límite máximo permisible, no obstante el Organismo Operativo de Tránsito  instancia responsable del control de las bocinas, conforme planes elaborados en coordinación con el Gobierno Municipal de La Paz (GMLP), no hace nada cuando éstos pasan los 80 decibeles, peor aún los agentes aumentan la contaminación con sus silbatos.
En cuanto al GMLP, éste cuenta también con procedimientos y normativas para control y sanción; pero las acciones de prevención, vigilancia y otros aspectos relativos a la contaminación acústica como campañas efectivas y sostenibles son escasas y lo que menos se cuida es la calidad de vida de los ciudadanos muy a pesar de sus quejas y denuncias constantes.
Las tareas del gobierno central y local deben ser conjuntas para preservar aquellos lugares –pocos por cierto- que gozan de buena calidad acústica y otras para mejorar la situación de barrios y zonas que viven incómodas con tanto malestar ruidoso.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que el ruido es la primera molestia ambiental en los países desarrollados. Es un contaminante muy presente en las ciudades que influye de manera significativa en la convivencia y el bienestar. Luego de la contaminación atmosférica, el ruido es uno de los factores que provoca más alteraciones en la salud, según esta organización.
Hagamos algo al respecto urgentemente.


Siglo 21

Urbanización y desigualdad

La más reciente publicación de Finanzas & Desarrollo (F&D) del FMI asegura que la forma más eficiente de luchar contra la desigualdad de ingresos en los países en desarrollo es ahora concentrar esfuerzos en el área urbana. En Bolivia el INE asegura que a 2018 el 69,4% de la población boliviana, vive en zonas urbanas, por lo que las nuevas tendencias calzan muy bien con las descripciones del F&D.
La nueva cara de la desigualdad
En las últimas tres décadas, el mundo ha experimentado una convergencia global entre países, principalmente debido al aumento del comercio internacional, los avances tecnológicos y la integración económica. Factores han llevado a una nueva fase de desigualdad dentro de zonas de rápida urbanización.
Según el Informe de Urbanización Mundial, 55% de la población mundial es urbana, un aumento de 30% en 1950. Se proyecta que la población urbanizada mundial llegue  a 68 % en 2050. Además, la División de Población de la ONU informa que “la urbanización ha sido más rápida en algunas regiones menos desarrolladas en comparación con las tendencias históricas en las regiones más desarrolladas”. La convergencia en el crecimiento de la urbanización, entre las economías en desarrollo y avanzadas también sugiere que los problemas de las ciudades afectan cada vez más a los países en todos los niveles de ingresos.
Centros de desigualdad
Además de la rápida urbanización, las ciudades se han convertido en el lugar de la desigualdad más severa que vemos hoy. Los índices de Gini dentro del país son más altos a medida que aumenta la densidad de población. En las condiciones actuales, las ciudades tienden a recompensar desproporcionadamente a las personas con ingresos más altos.
Además, las ciudades atraen a las personas principalmente de la parte superior e inferior de la distribución del ingreso. Se calcula que la reestructuración económica mundial, descrita anteriormente, cree una distribución de ingresos más polarizada dentro de los países. Y que la desigualdad dentro de las ciudades empeore.
Oportunidades
Los fenómenos convergentes de urbanización y crecimiento de la desigualdad, brindan oportunidades para convertir las ciudades en medios para la convergencia económica. F&D cita a Edward Glaeser, quien resume bien las “economías de aglomeración” como los beneficios obtenidos de personas y empresas que se ubican cerca unas de otras, en ciudades y grupos industriales, que se obtienen principalmente a través de la reducción de los costos de transporte.
Los encargados de formular políticas deben abordar la desigualdad de acceso a empleos y servicios entre comunidades de diferentes niveles de ingresos.
La inversión insuficiente en carreteras, autobuses, líneas de tren y metro puede aislar a los distritos dentro de las grandes ciudades de empleos, educación y servicios. Los mayores costos de movilidad, en forma de tiempos de viaje más largos y la falta de transporte asequible, son barreras para la movilidad ascendente de las personas de bajos ingresos en las ciudades.
Soluciones prácticas
Los gobiernos locales y el sector privado deben trabajar juntos para lograr una planificación eficiente del transporte. Esto resulta muy eficiente en reducir la disparidad de ingresos porque la disparidad de ingresos suele coincidir con zonas específicas de una ciudad. Un buen sistema de transporte significa un mejor acceso a fuentes de empleo, escuelas, hospitales y otros beneficios urbanos que igualan la cancha.
Sin embargo, la asignación incorrecta de tierras y recursos públicos empeora las condiciones de las comunidades marginadas, lo que contribuye a la desigualdad intraurbana